Para todos los docentes las primeras semanas de clase son especiales por la emoción que despierta esta nueva experiencia, pero también están llenos de tensión sobre todo ahora que el ciclo escolar se desarrolla a distancia. Aquí te presentamos algunas ideas para ayudarte a transitar con menos dificultades:

Prepara una presentación de tus clases: puede sonar simple, pero funciona. Si al iniciar cada día frente a tu grupo explicas de qué tratará la clase y las primeras palabras que diriges a tus estudiantes salen una a continuación de otra, sin titubeos, eso te aportará tranquilidad y seguridad y lo que sigue pude ser más fácil.

Recuerda que eres su maestro: podrás ser accesible y cordial, pero no olvides que tú estás al frente del grupo.

No dudes en pedir consejo: con seguridad hay otros profesores que han pasado por donde tú te encuentras ahora. Pídeles consejo, aprovecha su experiencia.

No tienes que saberlo todo, no tienes que ser una enciclopedia: si alguien hace una pregunta y no conoces la respuesta es mejor aplazar la respuesta hasta estar seguro de ella.

No trates de impresionarlos, sino de que aprendan: que tus estudiantes queden impresionados te puede venir bien en el primer contacto con ellos; sin embargo, no olvides que deben aprender, no quedarse boquiabiertos. Lo importante es despertar en ellos la curiosidad por la información que les das y el interés por saber más.

Asegúrate que todo funciona: si vas a apoyar tus clases en línea con recursos tecnológicos como videos o aplicaciones, realiza ensayos previos para prevenir cualquier inconveniente.

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